Santa María, Madre de Dios 

Entrada: Queridos hermanos: celebramos la solemnidad de Santa María, Madre de Dios.

María, con su sí, asume la vocación de la maternidad, participando así del misterio de la encarnación del Hijo de Dios.

¡Alabemos y glorifiquemos a Dios por la misión de la bienaventurada Virgen María en la Historia de la Salvación!

Nos ponemos de pie. Cantamos:

1ª lectura: La indicación de Dios es que los sacerdotes bendigan al pueblo israelita; entregando a Moisés las palabras de bendición.

         Escuchamos con atención.

 

2ª lectura: Dios envía a su Hijo —por medio de una mujer— para redimirnos y hacernos hijos adoptivos.

 

Evangelio: Los pastores regresaron, alabando y glorificando a Dios por todo lo que habían visto y oído.

Nos ponemos de pie. Cantamos el Aleluia.

 

Escúchanos, Señor

- Por la Iglesia: que anuncie gozosamente el misterio de la salvación...

- Por la humanidad: que acepte la luz del sol que viene de lo alto...

- Por los bautizados: que vivamos la vocación cristiana con alegría y en paz...

- Por los sufrientes: que lleven su cruz con fortaleza y esperanza...

- Por quienes estamos aquí: que seamos constructores de la paz de Dios...

Ofrendas: Con los dones presentamos al Señor el deseo y propósito de ser constructores de paz.

Cantamos: 

Comunión: Jesús, nacido de María, nos llama a edificar la paz.

Cantamos:

Despedida: Nos encomendamos a María, quien llevó en su seno al Sol de justicia que nace de lo alto.

Cantamos: