Difuntos

Misa de difuntos

Entrada: Jesús, Hijo de Dios, nacido de mujer, ha padecido la muerte. La obediencia de Jesús transformó la maldición de la muerte en bendición.

    Nos ponemos de pie. Cantamos:

Lectura: La muerte es el final de la etapa terrena de la vida, pero "no de nuestro ser", pues el alma es inmortal.
    Escuchamos con atención.


Evangelio: El evangelio proclama el misterio pascual, y alienta la esperanza de encontrarnos también un día en el reino de Dios.
    Nos ponemos de pie. Cantamos el Aleluia.

Oración universal: Jesús resucitado, óyenos.

1- que la Iglesia anuncie gozosamente el misterio pascual...

2- que tu resurrección anime la esperanza de una vida plena...

3- que nuestros difuntos sean recibidos en la Jerusalén Celestial...

4- que los moribundos reciban la gracia de la conversión final...

5- que caminemos sin desanimarnos a la Jerusalén del cielo...

Ofrendas: Con los dones ofrecemos nuestra oración por el eterno descanso de los difuntos. 
    Cantamos:

Comunión: Jesús es el pan vivo bajado del cielo, alimento para nuestro caminar a la Jerusalén Celestial.
    Mientras se distribuye la comunión, cantamos:

Despedida: La Virgen María acompañe a nuestros difuntos a la casa del Padre Celestial.
    Mientras nos retiramos del templo, cantamos: